«El rendimiento durante 75 minutos, más o menos, fue extraordinario. Y luego perdimos 3-1. Esto demuestra la difícil situación en la que estamos»
El Liverpool (4°), actual campeón y defensor de título, volvió a caer en la Premier League, esta vez ante el Leicester (2°) 1-3 por la jornada 24, con un muy flojo partido de su mediocampo y un error de escándalo de Alisson Becker.
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Los ‘Reds’ inauguraron el marcador con un muy buen gol de Salah (67′) a pase de Firminho, que con su jugada pagó la entrada, todo dentro del área, pisando el balón y dando la asistencia de taco.
Tuvieron que pasar solo 13 minutos para que un penal James Maddison (80′) igualara el marcador y se le viniera el cielo a los de Kloop.
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Luego llegó Alisson Beker para bajar del cielo a todo el equipo. En una salida en falso fuera del área, consecuencia de un mal pase largo del Leicester, el arquero del Liverpool falló y le dejó en bandeja de plata el gol a Jamie Vardy (82′).
Tres minutos más tarde Harvey Barnes (85′) marcaba el 3-1 definitivo.
«El rendimiento durante 75 minutos, más o menos, fue extraordinario. Y luego perdimos 3-1. Esto demuestra la difícil situación en la que estamos», lamentó Jürgen Klopp, que encaja así tres derrotas al hilo en la Premier, cuestión que no pasaba desde 2014.
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Tras esta pérdida el Liverpool queda de cuarto en la tabla con 40 puntos, mientras el Leicester se encarama en la segunda casilla con 46 puntos y un partido menos que los demás.
