La decisión de la JEP de retirar competencias para juzgar a Salvatore Mancuso fue criticada por el magistrado José Manuel Bernal. Se está presentando un conflicto de competencias ante la Corte Constitucional.
El Tribunal de Justicia y Paz de Bogotá se ha visto envuelto en una situación de controversia tras la decisión del magistrado Manuel Bernal de otorgar libertad condicional al excomandante paramilitar Salvatore Mancuso. Esta situación se produjo a pesar de la competencia prevalente y exclusiva que había asumido la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) sobre Mancuso el pasado lunes 18 de marzo: ahora la Corte Constitucional tiene la última palabra
Y es que la JEP plantea que la decisión de la libertad de Mancuso es de competencia exclusiva de esta jurisdicción, lo que ha generado un conflicto con el Tribunal de Justicia y Paz. Durante la audiencia celebrada este miércoles, Justicia y Paz cuestionó la decisión de la JEP, argumentando que esta no puede desplazar la actividad judicial de ese sistema, que también tiene un carácter transicional.
El magistrado Bernal, en su intervención, calificó la actuación de la Jurisdicción Especial como una intromisión y remitió el caso a la Corte Constitucional para que resuelva la disputa entre la JEP y Justicia y Paz. En su declaración, el magistrado señaló: «Sustituir las detenciones preventivas intramurales dictadas en mayo de 2015 y agosto de 2020 contra Mancuso por otra (…) Para materializar librar boleta de libertad al sitio de reclusión donde está restringido haciéndose efectiva la orden a condición de que no sea requerido por otra distinta autoridad«.
A pesar de la decisión del magistrado Bernal, Mancuso no será liberado debido a las 33 medidas de Justicia y Paz que aún pesan sobre él en Barranquilla, donde se le ha negado la libertad al exparamilitar. En este caso particular, será la Corte Suprema de Justicia la que tendrá la última palabra en cuanto a la situación de Mancuso y la disputa entre la JEP y Justicia y Paz.
