En el municipio de San Gil en Santander, se registra un brote de gastroenteritis vinculado a una presunta contaminación del suministro de agua por un exceso de cloro. Ya son cerca de mil personas afectadas.
En el municipio de San Gil, Santander, las autoridades han declarado alerta amarilla, con la posibilidad de elevarla a roja, ante un preocupante brote de gastroenteritis que ha afectado a más de 1.000 personas. La Secretaría de Salud de Santander confirmó que la enfermedad de transmisión alimentaria se debe al exceso de cloro en el agua de consumo, afectando a habitantes de más de 8 municipios del departamento.
La subsecretaria de Salud de San Gil, Margarita Lucía Vega, señaló la importancia de realizar revisiones exhaustivas y precauciones, destacando la necesidad de cuidados en el lavado de manos, alimentos consumidos fuera del hogar y preparación de alimentos en las viviendas.
Al parecer, este se produjo por consumo de agua, sin embargo, estamos a la espera de los resultados que obtenga el equipo de respuesta inmediata de epidemiología.
— Gobernación de Santander (@GobdeSantander) December 13, 2023
Leonel Quiroz, gerente de Acuasan, aseguró que el agua tratada y distribuida por la empresa es 100% apta, aunque están trabajando en un plan de acción conjunto con las autoridades de salud para garantizar la potabilidad del agua.
El brote de gastroenteritis no se limita a San Gil; en Villanueva, Charalá, Aratoca y Páramo también se reportan casos de esta enfermedad. La gastroenteritis, que puede ser causada por virus, bacterias o parásitos, presenta síntomas como diarrea, vómitos, fiebre y dolor abdominal.
Si bien la mayoría de las personas se recupera completamente en unos pocos días con tratamiento adecuado y cuidados en casa, se subraya la capacidad de la gastroenteritis para dejar huellas a largo plazo en la salud. La deshidratación es una preocupación inmediata en las primeras etapas, y la enfermedad puede desencadenar complicaciones agudas, especialmente en personas con sistemas inmunológicos comprometidos.