En el Día Internacional de los Primates, le contamos detalles de esta especie en vía de extinción

 

El primate más amenazado del planeta es el gibón de Hainan que, a duras penas, ha logrado sobrevivir, pues de su especie tan solo quedan 30 ejemplares.

Los pocos animales que aún sobreviven se encuentran en una franja de bosque en la isla china de Hainan, su situación es crítica y es vital importancia su supervivencia.

Gibón de Hainan

La casi desaparición del Gibón de Hainan se debe a décadas de fragmentación forestal causada por la tala y las actividades agrícolas que han hecho que poco a poco esta especie disminuya, suelen vivir en las copas de los árboles ya que temen desplazarse sobre el suelo, estos acróbatas primates usan sus largos brazos para pasar de árbol en árbol y así recoger su alimento que suelen ser las frutas del bosque.

Conoce al gibón de Hainan el primate más amenazado del planeta
Foto: www.monkeyworlds.com

El tifón Rammasun del 2015 también influyó en la desaparición de su hábitat ya que agravó la perdida de árboles y destruyó muchas tierras, lo que evita que la especie se desplace, se alimente, mezcle o encuentre pareja, es por eso que el botánico Bosco Pui Lok Chan, decidió gestionar el Proyecto de Conservación del Gibón de Hainan, junto al Jardín Botánico y Granja Kadoorie, en Hong Kong; que busca la conservación de este primate.

Teniendo en cuenta que en su naturaleza el gibón de Hainan no toca el suelo, contrataron a trepadores de árboles profesionales para instalar un puente de cuerdas artificial en la sección dañada del bosque, la primera vez que se probaba dicha intervención con la especie.

Conoce al gibón de Hainan el primate más amenazado del planeta
Foto: www.monkeyworlds.com/es/gibon

El puente constaba de dos cuerdas de alpinismo colgadas a lo largo de una zanja de 15 metros de ancho entre los árboles. También instalaron cámaras trampa activadas por el movimiento cerca del puente.

Aunque los resultados fueron positivos y se demostró que las hembras y los gibones más jóvenes parecían ser los más dispuestos a utilizar el puente en lugar de balancearse entre las cuerdas, como hacen con las ramas de los árboles, Chan aclara que las cuerdas son una solución a corto plazo y que la prioridad debe ser restaurar los bosques naturales.