«A menudo es difícil para los gobiernos autócratas y represivos» entender que en EEUU las agencias de seguridad operan «con independencia respecto a las cuestiones políticas»
El Departamento de Estado de Estados Unidos rechazó este lunes que el régimen genocida en Venezuela, liderado por el buscado narcotraficante Nicolás Maduro, se retirara de la «mesa de negociación» de México tras la extradición del empresario colombiano Alex Saab a ese país.
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De hecho acusó directamente a la tiranía del hermano país de poner al testaferro del dirigente chavista hoy en Miraflores por «encima» del «bienestar de millones de venezolanos», ya que a este se le acusa de haber desviado dinero de los CLAP, programa subsidiado de alimentos.
«Con la suspensión de las conversaciones (…) el régimen de Maduro ha puesto el caso de un individuo por encima del bienestar de millones de venezolanos que han dejado claro sus aspiraciones de democracia, mayor libertad y prosperidad», indicó el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
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Más adelante, dijo que «a menudo es difícil para los gobiernos autócratas y represivos» entender que en Estados Unidos las agencias de seguridad operan «con independencia respecto a las cuestiones políticas (…) Los cargos criminales contra Alex Saab datan de mucho antes y no tienen relaciones políticas«.
Ante, el genocida Nicolás Maduro señaló que el Gobierno de «Estados Unidos sabía que secuestrando a Alex Saab, miembros de la Comisión de Diálogo en México (esto es falso), le metía una puñalada mortal a los diálogos y negociaciones en México».
