La «lista negra» son documentos que estaban clasificados y que guardan relación con Colombia, gobiernos de los años setenta, y la vinculación de políticos, funcionarios, militares y policías con el narcotráfico.
El reciente destape del Libro del Archivo de Seguridad de los Estados Unidos ha reflejado los cimientos de la historia política de Colombia y Estados Unidos. Documentos hasta ahora confidenciales fueron puestos en evidencia para mostrar una «lista negra» que pinta un oscuro panorama de complicidades narcóticas en altas esferas colombianas, datada específicamente en 1977, durante la presidencia de Jimmy Carter.
En el corazón de este intrigante relato se encuentra una lista meticulosamente elaborada por el gobierno de Estados Unidos, detallando nombres de altos funcionarios colombianos supuestamente inmersos en actividades de narcotráfico. Entre estos destacan figuras de renombre como el Ministro de Defensa, general Abraham Varón Valencia; el Ministro de Trabajo, Óscar Montoya Montoya; y el coronel Humberto Cardona Orozco, jefe de INDUMIL. Incluso se menciona al futuro presidente de Colombia, Julio César Turbay, aunque de forma indirecta a través de su sobrino.
La entrega de esta lista tuvo lugar en un contexto singular: una sesión informativa considerada «sin precedentes» por la CIA, donde se presentó al entonces presidente colombiano, Alfonso López Michelsen, un dossier detallado que implicaba a estos altos funcionarios en actividades ilícitas relacionadas con el narcotráfico. Este acontecimiento marcó el culmen de varios meses de preparación y estrategia política de EE.UU. en torno a este espinoso tema.
Las revelaciones más impactantes brotaron en una transmisión del programa de televisión CBS 60 Minutes en abril de 1978, tras obtener una copia de un informe de la Casa Blanca de junio de 1977. Este reporte arrojaba luz sobre sobornos, tráfico de drogas y otras prácticas ilícitas que involucraban a los funcionarios mencionados.
Por ejemplo, se detallaba que el ministro de Defensa había «recibido sobornos por narcóticos y contrabando«, mientras que el ministro de Trabajo había conversado sobre «tráfico ilícito de cocaína y café» con un conocido narcotraficante. También se señalaba que el exjefe de inteligencia de la policía de Cali estaba «operando un laboratorio (de cocaína) en su residencia en Cali«, entre otras acusaciones graves.
Los documentos o «lista negra», incluyen memorandos de alto nivel y anotaciones manuscritas de Carter, reflejando su enérgica postura contra la corrupción en Colombia. Este episodio histórico, durante la administración Carter, marcó un momento crucial en las relaciones bilaterales, especialmente en la lucha contra el narcotráfico y la corrupción.
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