La mujer de nacionalidad brasileña ocultó las ranas dentro de recipientes de muestras y que serían enviadas a Panamá. la extranjera enfrenta cargos por el delito de tráfico de fauna silvestre.
La Policía Metropolitana de Bogotá dió un importante golpe al tráfico ilegal de fauna al capturar a una mujer de nacionalidad brasileña en el Aeropuerto Internacional El Dorado. La mujer, de aproximadamente 37 años, intentaba sacar del país 130 ejemplares de la rana arlequín venenosa, una especie en peligro de extinción.
Según las autoridades, las ranas fueron encontrados ocultas en frascos dentro del equipaje de bodega de la mujer. Sin embargo, durante el registro de rutina, los oficiales notaron que las ranas estaban en condiciones lamentables, sin la ventilación adecuada y expuestas a condiciones climáticas desfavorables que ponían en riesgo su supervivencia.
El coronel Juan Carlos Arévalo, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá, destacó que esta acción se llevó a cabo en el marco de la protección de los recursos naturales. La mujer se dirigía a la ciudad de Sao Paulo, en Brasil, pero tenía planeado hacer una parada en Panamá, donde pretendía vender ilegalmente los ejemplares.
Las autoridades también determinaron que las 130 ranas fueron extraídas de los bosques tropicales húmedos de la región pacífica y trasladadas a Bogotá para su comercialización en otros países. A pesar de que la mujer intentó justificar la posesión de los animales como un regalo de comunidades étnicas en el departamento de Nariño, las autoridades retuvieron a la mujer y la entregaron a la Fiscalía General de la Nación para su posterior judicialización por el delito de tráfico de fauna.
Por su parte, un equipo de la Secretaría de Ambiente de Bogotá se encuentra trabajando en la valoración e hidratación de las ranas, que estaban al borde de la muerte por asfixia. Se espera que los ejemplares sean devueltos a su ecosistema natural en los próximos días. La mujer podría enfrentar una pena de cuatro a doce años de prisión, según lo establece la ley de delitos ambientales de Colombia.
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