El jefe paramilitar Yevgueni Prigozhin ordenó el retorno de sus combatientes a las bases para «evitar derramamiento de sangre» en Rusia.
Este 24 de junio se produjo la mayor crisis interna en Rusia desde el inicio de la guerra ya hace un año y medio. Durante algunas horas, uno de los bastiones más importantes, aunque no afiliado al Kremlin, se rebeló contra las instituciones rusas. Se manifestaron en contra de Valeri Guerásimov y Serguéi Shoigú, quienes ocupan los cargos de jefe del Estado Mayor y ministro de Defensa ruso, respectivamente. Sus tropas se desplegaron y tomaron el control de la ciudad de Rostov, para luego dirigirse hacia Moscú.
Sin embargo, el grupo paramilitar Wagner, liderado por Yevgueni Prigozhin cesaron en sus convicciones, según, para «evitar derramamiento de sangre rusa«.
🇷🇺#Rusia | El jefe del Grupo Wagner, Evgueni Prigozhin, fue captado saliendo de Rostov del Don a bordo de una camioneta rumbo al exilio en 🇧🇾#Bielorrusia, después de haber negociado por su vida. pic.twitter.com/6yHNED62aJ
— Fabian Guillén (@JFabianGuillen) June 24, 2023
Según Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, alcanzaron un acuerdo para retirar los cargos contra Prigozhin. Además, no se tomarán medidas contra los mercenarios involucrados en la rebelión, y aquellos que no participaron tendrán la opción de firmar contratos con el Ministerio de Defensa ruso.
El jefe del grupo mercenario abandonó la noche de este sábado la ciudad rusa de Rostov, donde se ha atrincherado con sus fuerzas desde esta mañana, para partir rumbo a Bielorrusia. Al abandonar el cuartel general de la Región Militar Sur, Prigozhin recibió las aclamaciones del público e incluso saludó por la ventanilla a algunas personas.
Finalmente, las autoridades rusas levantaron este domingo por la mañana todas las restricciones impuestas en las autopistas del país tras el desafío lanzado este viernes por el grupo Wagner al poder del presidente Putin, según informa la agencia rusa Tass.
Yevgueni Prigozhin, líder de los paramilitares, anunció el control de varias instalaciones militares y aseguró la toma del cuartel general del ejército ruso en Rostov. ¿Guerra civil?
Los mercenarios de Wagner enviados por Rusia a combatir en Ucrania se han sublevado contra el ejército, lo que ha llevado al país a una inminente guerra civil. Yevgueni Prigozhin, líder de estas fuerzas rebeldes que han tomado el control de la ciudad de Rostov del Don en el sur de Rusia, ha amenazado con avanzar hacia Moscú.
Prigozhin exige la destitución del ministro de Defensa, Sergei Shoigu, y del principal general de Rusia, Valery Gerasimov. Mientras tanto, sus fuerzas permanecen atrincheradas en Rostov, dispuestas a mantener su posición hasta que se cumplan sus demandas de cambio en la cúpula militar.
Como respuesta directa a la amenaza del grupo paramilitar, las autoridades en cabeza del presidente Vladimir Putin, han implementado un «régimen de operación antiterrorista» en Moscú, fortaleciendo las medidas de seguridad en la ciudad. El líder de los mercenarios, advirtió que sus fuerzas avanzarán implacablemente y eliminarán todo obstáculo que se interponga en su camino.
En una serie de mensajes difundidos el viernes por la noche y el sábado de madrugada, Prigozhin, de 62 años, proclamó que él y sus tropas han ingresado a la ciudad rusa de Rostov, una importante urbe en el sur del país con una población de más de un millón de habitantes, y han tomado el control de sus instalaciones militares.
La situación de conflicto interno en Rusia podría desencadenar una distracción de atención y recursos en un momento crítico de la guerra con Ucrania. Esta coyuntura se produce en paralelo con la contraofensiva anunciada por Kiev.