Las autoridades confirmaron que el sujeto, señalado de asesinar al docente, pagará tras las rejas
Orlando Alberto Rojas Bedoya, alias Pecas, presunto responsable del homicidio del profesor de ballet y matemáticas, Gamaliel Enrique Álvarez García, fue condenado a 24 años de prisión tras el proceso de investigación.
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«La evidencia recaudada por los investigadores permitió establecer que, una vez cometido el homicidio en el baño de la vivienda del profesor, alias Pecas, habría procedido a lavar y limpiar la sangre alterando la escena del crimen para ocultar lo sucedido», indica la Fiscalía.
También se determinó que Rojas Bedoya incineró el cuerpo del profesor para desaparecer la evidencia; luego le hurtó la motocicleta y la vendió en 10 millones de pesos.
Los hallazgos
- Rojas habría hurtado una motocicleta que pertenecía al profesor y la vendió en 15 millones
- Después de la desaparición del docente se registraron movimientos en sus cuentas bancarias
El presunto criminal fue imputado por los delitos de homicidio agravado con ocultamiento, alteración o destrucción de elemento material probatorio; hurto calificado, falsedad en documento privado y fraude procesal. Aunque este no aceptó los cargos.
El caso
Los Policías al llegar, detallaron dos elementos claves: El primero es que el baño de la vivienda estaba incinerado, que a pesar de la magnitud pudo ser controlado rápidamente.
Como segundo elemento clave esta la habitación, que según los comandantes, tenía un olor nauseabundo y era evidente que se había realizado una reparación sobre el mesón.
Varios vecinos manifestaron que no lo veían hace mucho tiempo, y que algunos de ellos se acercaban a preguntarle como se encontraba.
Como una serie de misterio, en la historia de Gamaliel Álvarez puede haber muchos posibles sospechosos, pues al parecer, según sus vecinos, en sus últimos días estuvo rodeado de diferentes personas.
«Gama» como lo llamaban sus amigos y familiares, era un hombre que se desempeñaba como profesor en varias instituciones educativas de Cundinamarca, pero su cuerpo fue encontrado enterrado en una placa de cemento instalada debajo de un mesón de cocina.
El hombre había sido reportado como desaparecido hace dos meses en la zona de Sabana Norte, su familia preocupada, comenzó una búsqueda exhaustiva, realizaron una llamada a su casa, pero era otro hombre el que contestaba, haciéndose pasar por Gamaliel.
Todo fue un misterio hasta el 26 de Noviembre, cuando la Policía de Cajicá se traslado a un sector del pueblo, pues no aguantaban los malos olores provenientes de una vivienda.
La casa era la de Gamaliel, los peritos al llegar, comenzaron a inspeccionar todo el lugar, y notaron unas manchas extrañas en el cemento del patio trasero, procedieron a romperla y encontraron restos humanos.
Sacar los restos de allí fue complicado, pues debían mantener el cuerpo intacto para hacer la necropsia.
Agentes del CTI, lograron identificar los restos gracias a la carta dental, huellas dactilares y las prendas que vestía el docente.
