El empresario había ordenado reabrir las cuentas de Twitter que fueron suspendidas por comentarios discriminatorios contra la mujer.
No son pocas las polémicas en Twitter desde que el magnate sudafricano asumió el poder de la compañía azul. Usuarios de la red social e incluso los mismos funcionarios se han manifestado sobre las nuevas políticas que “atentan” contra la normalidad y tradición de lo que ha sido dicha red social. Uno de los más recientes casos, fue el despido de una alta ejecutiva por haber discrepado con una idea de Musk, o también la retractación del mismo al haberse burlado de un empleado en condición de discapacidad.
Otra de los recientes escándalos para Twitter se da después de que el Instituto para el Diálogo Estratégico (organización dedicada a la investigación de campañas de desinformación y odio) reveló que con la reapertura de las cuentas suspendidas por comentarios misóginos y el poco control sobre las nuevas que incurren en este tipo de falta, son 69% la cantidad de usuarios en la red que realizan este tipo de comportamientos.
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Una piedra angular fue la reactivación de Andrew Tate, empresario distinguido por sus posturas machistas y virales sobre la masculinidad y la minimización del sexo femenino en la sociedad, con lo cual desde Twitter se le abrió la puerta para promover una conducta que sí se ha tratado de erradicar desde otras plataformas como Facebook e Instagram.
Elon Musk no se tomó en serio el estudio y respondió en un tuit: «Perdón por hacer que Twitter pase de un paraíso nutritivo a un lugar que tiene… trolls”
Sorry for turning Twitter from nurturing paradise into place that has … trolls ???? pic.twitter.com/HaWl1jPfOm
— Elon Musk (@elonmusk) March 6, 2023