En medio de la sequía la lluvia ayuda a combatir los fuertes incendios.

En el estado de Nueva Gales del Sur (sudeste de Australia), uno de los lugares más afectados por los incendios, se presentaron fuertes lluvias que ayudaron a mitigar el fuego, según informó la oficina meteorológica local.

Desde hace varios meses se ha presentado una sequía alarmante que ha desatado incendios forestales en la zona, cobrando la vida de 28 personas y más de 1.000 millones de animales.

Por su parte, el Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur se pronunció mediante un video publicado en redes sociales donde se observa la lluvia en un bosque en llamas, «es un alivio para los bomberos que trabajan en Nueva Gales del Sur».