El Dengue produce 390 millones de infecciones anualmente, mientras que el Chikunguña tuvo en el último año una tasa de crecimiento del 487%.
El dengue y el chikunguña son enfermedades transmitidas por mosquitos que representan un riesgo para la salud humana. Aunque son causadas por diferentes virus, comparten características similares y son consideradas enfermedades febriles agudas.
El primero puede causar fiebre alta, dolor de cabeza intenso, dolores musculares y articulares, erupción cutánea y fatiga. En casos más graves, puede haber hemorragias, daño orgánico y, en algunos casos, llevar a un estado de shock potencialmente mortal llamado dengue grave o fiebre hemorrágica del dengue.
La principal preocupación con el dengue radica en el hecho de que no existe un tratamiento específico para la enfermedad y no hay vacuna disponible comercialmente en todos los países. La atención médica temprana, el manejo de los síntomas y la prevención de la proliferación de mosquitos son las principales medidas para controlar la propagación y reducir el impacto del dengue en las comunidades afectadas.
Los síntomas del chikunguña incluyen fiebre alta, dolor intenso en las articulaciones, especialmente en las muñecas, las rodillas, los tobillos y los dedos, erupción cutánea, dolor muscular y fatiga. Los síntomas pueden ser debilitantes y prolongados, y algunas personas pueden experimentar dolor en las articulaciones durante meses o incluso años después de la infección.
Puede interesarle: TRÁGICA TENDENCIA: JÓVENES MUEREN DE PROBLEMAS PULMONARES POR VAPEO
Aunque rara vez es mortal, el chikunguña puede causar complicaciones graves, especialmente en personas mayores, pacientes con enfermedades crónicas y mujeres embarazadas. Al igual que con el dengue, no hay un tratamiento específico para el chikunguña y la prevención de las picaduras de mosquitos es fundamental para evitar la propagación de la enfermedad.
Ambas enfermedades son peligrosas debido a su capacidad para causar epidemias y la ausencia de tratamientos antivirales específicos o vacunas disponibles en todos los lugares afectados.
Según la OMS, «En los últimos años, en la región de las Américas, con la aparición de nuevos arbovirus como los que transmiten el Zika y chikungunya, sumados a los ya endémicos como el dengue y fiebre amarilla, representan un reto para los sistemas de salud, ya que demandan la mejora del diagnóstico clínico y de laboratorio, de la vigilancia epidemiológica, y del control las poblaciones de mosquitos para prevenir la transmisión de enfermedades, y evitar consecuencias graves en la población».
🔴ATENCIÓN: identifica los síntomas de #Dengue y #Chikunguña.
Lee más 👇🏽 https://t.co/ihchN0Vt0r pic.twitter.com/kLIRpogZ0B
— OPS/OMS (@opsoms) June 28, 2023