Las autoridades reportaron más de 40 victimas mortales en la escuela de Uganda.
Un trágico incidente ocurrió en el oeste de Uganda, cerca de la frontera con la República Democrática del Congo (RDC), cuando un grupo vinculado a la organización yihadista Estado Islámico atacó un colegio de secundaria.
En este ataque perdieron la vida al menos 41 personas, la mayoría de ellas estudiantes. El incidente ha causado conmoción y tristeza, y destaca la necesidad de abordar la amenaza del terrorismo yihadista en la región. Las autoridades están investigando el ataque y tomando medidas para garantizar la seguridad de la población.
«Responsables de este acto espantoso deben ser llevados ante la justicia», afirmó el secretario general de la ONU.
En el lugar, fueron encontradas 8 personas gravemente heridas, por ahora, se encuentran en el hospital de localidad de Bwera.
Desde un principio el alcalde del lugar, Sylvester Mapozi, había anunciado la muerte de 39 personas. «Al huir, los atacantes también asesinaron a dos personas, una mujer y un hombre. Esto eleva el número a 41″, informó horas más tarde.
Según investigaciones, los rebeldes huyeron hacia la región de Virunga, ubicada en la frontera entre Uganda y Ruanda. Este parque es reconocido a nivel mundial por albergar especies raras, incluyendo gorilas de montaña. Las milicias, que se encuentran activas en el este de la República Democrática del Congo, también utilizan el parque como refugio. La presencia de estas milicias y la violencia asociada a ellas destacan la compleja situación de seguridad en la región.
Una de las personas que encontraba en la escuela de Uganda, informó que el atentado fue propiciado con cuchillos y armas.
También un uniformado menciono que «los rebeldes cerraron con llave el dormitorio de los chicos y le prendieron fuego. La sección de las chicas no la cerraron, de manera que estas pudieron salir corriendo, pero al hacerlo unas fueron atacadas con machetes y otras recibieron disparos».
Por ahora las autoridades se mantiene en la búsqueda de los criminales por vía aérea y terrestre y así mismo, en el análisis del ADN de los cuerpos que fueron incinerados en la escuela para conocer su identificación.
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