El cambio climático y la calidad del aire, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), no deben ser abordados de manera separada, sino que deben enfrentarse simultáneamente.
Según expertos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), los eventos de calor extremo, junto con incendios forestales y la dispersión de polvo del desierto, están deteriorando significativamente la calidad del aire en todo el mundo. Esto tiene un impacto negativo tanto en la salud humana como en la agricultura.
El boletín anual de la OMM, que analiza la evolución de la calidad del aire y sus efectos, resalta:
El riesgo (para la salud) no solo proviene de las altas temperaturas, sino también de la contaminación que generalmente se subestima a pesar de sus efectos perniciosos.
A pesar de que los datos se centran principalmente en los eventos de 2022, los expertos enfatizan que este verano en el hemisferio norte, que está llegando a su fin, ha sido más extremo que en años anteriores, debido a las altas temperaturas.
La OMM confirmó que los últimos tres meses (junio a agosto) marcaron los tres meses consecutivos más cálidos jamás registrados en la historia del planeta.
En 2022, se registraron niveles de exposición al ozono en cientos de puntos monitoreados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que superaron el límite máximo permitido. Esta sustancia gaseosa, que tiene efectos perjudiciales para la salud humana cerca de la superficie terrestre, se detectó por primera vez en el suroeste de Europa.
Con el tiempo, mediciones similares se llevaron a cabo en Europa central y luego en el noroeste del continente, a medida que se extendía la ola de calor y llegaba polvo del desierto, en este caso, del Sahara.
Pese a no tener ninguna responsabilidad sobre la #crisisclimática, las niñas y los niños sufren sus consecuencias.
El Comité de los Derechos del Niño de la ONU ha adoptado una guía sobre derechos del niño/a y el medioambiente, con especial atención al cambio climático. https://t.co/3A5077ToHZ
— ONU Cambio Climático (@CMNUCC) August 30, 2023
La mala calidad del aire crea un círculo vicioso, ya que sustancias como el nitrógeno, el sulfuro y el ozono perjudican el medio ambiente y disminuyen la producción de cultivos.
La OMM advierte que debido al ozono, la pérdida de rendimiento en cultivos básicos oscila entre -4.4 % y -12.4 %. En áreas cruciales como India y China, las pérdidas pueden llegar al 30 % para cultivos como la soja y el trigo.
