La perspectiva de un experto sobre la reactivación económica del país en entrevista con Momento 24

Por: Alejandra Bustos

Diego Carrero Barón, economista, docente de posgrados de la Escuela Superior de Administración Pública (ESAP) e investigador del Centro de Pensamiento de Política Fiscal de la Universidad Nacional nos cuenta qué sucede con el panorama económico de Colombia en tiempos de pandemia.

¿Cómo se puede encontrar un equilibrio para estabilizar la economía sin descuidar la salud?

Cobran importante relevancia propuestas como, por ejemplo, la de una renta básica garantizada o un ingreso básico de emergencia, como lo ha planteado la Comisión Económica para América Latina o una renta mínima para las personas más vulnerables.

Y, en ese orden de ideas, se podrían garantizar varias cosas. Se podría garantizar que un número importante de la población se encuentre confinada en sus hogares, al mismo tiempo que esto no significa una amenaza para su bienestar. Entonces, ideas como la de la renta básica para garantizar un ingreso por lo menos a la población que se encuentra bajo la línea de indigencia, de pobreza y de vulnerabilidad.

Estamos hablando de 9.5 millones de familias. Un total de 14.2 millones que tiene el país, según las cifras del último censo del Dane, se convierten en una posibilidad para garantizar ese equilibrio. En tanto, también es importante señalar que los ingresos de esas familias como consecuencia de esa renta básica, podrían ser un motor que impulse el crecimiento económico y, por ende, la generación de empleo.

Los recursos han salido en primer lugar de los municipios. En segundo lugar, lo que se prevé, por supuesto, es un ajuste en relación a las cuentas del Gobierno Nacional.

El Presupuesto General de la Nación del próximo año implicará recortes en inversiones que se venían haciendo, por ejemplo, de cara al mejoramiento de la infraestructura del país. También se ha planteado como uno de los factores esenciales hoy el incremento de la deuda pública, es decir, la emisión de títulos de deuda pública por parte del Gobierno central.

Para afrontar la situación que estamos viviendo, y más en un contexto donde se prevé que el déficit fiscal será superior al 6 % del Producto Interno Bruto. En ese sentido, quienes van a terminar pagando las consecuencias de dicho endeudamiento son las colombianas y los colombianos.

¿Hacia dónde puede reorientarse la política Nacional?

Básicamente es hacer una ruptura con ese modelo que plantea que es bajo la lógica del libre mercado, que se puede garantizar la prosperidad. De esa lógica de libre mercado, la que tiene hoy a la humanidad en las condiciones de confinamiento y de temor generalizado por parte de la población.

Entonces es el momento en que el Estado reorganiza sus finanzas públicas, no en función de seguir garantizando rentas para el sector financiero, sino que fundamentalmente de lo que se trata en este momento es de desarrollar esfuerzos para garantizar 1. Ingresos básicos para el conjunto de la población. 2. Cobertura en materia de servicios públicos. 3. Acceso a salud. 4. Empleo.

En una sociedad donde, por cuenta de la precarización a la que ha conducido el modelo, básicamente una gran parte de la fuerza de trabajo se emplea en pequeñas y medianas empresas.

Sectores que ganan y los que pierden a causa de la pandemia

En general, en Colombia y en el mundo todos los sectores se han visto afectados, con excepción de aquellos dedicados a actividades de tipo tecnológico en lo que respecta a las comunicaciones. Hemos presenciado una contracción de las diferentes actividades con mayor ahínco en el caso del turismo, la hotelería, los restaurantes.
En el caso de los alimentos, hemos visto de alguna manera una continuidad y un incremento de las transacciones en lo que se refiere a tecnologías de la información, porque debido al teletrabajo y a actividades de ocio relacionadas, por ejemplo, con las series de televisión, pues entonces se ha visto una dinámica de crecimiento en relación a esta actividad.

En Colombia, cerca del 48 % de las personas se encuentran desarrollando actividades informales, 42 % se encuentran en el cuentapropismo. Tres de cada cuatro colombianos en edad de jubilación no tienen una pensión, en tanto, durante su vida productiva no cotizaron a pensiones. Y de la misma manera no, pues ni el Estado ni el sector privado garantizó dichas posibilidades.

Entonces una las cosas más dramáticas que podemos estar viviendo es el incremento de la pobreza, como lo plantea también la Comisión Económica de América Latina por parte de estos sectores. En el caso de las empresas que también se dedican a la que están en el marco de la informalidad, la restricción respecto al acceso al crédito puede conducir en un contexto también de incremento de las deudas en lo que respecta, por ejemplo, al pago de proveedores y pago de arrendamientos, pues puede significar definitivamente la quiebra.

Soluciones para los empresarios

Las posibilidades para evitar que los empresarios colombianos se sigan viendo afectados por cuenta de la cuarentena tienen que ver básicamente con tres cosas:

  • Debe existir asistencia por parte del Gobierno Nacional, asistencia encaminada a permitir uno o la reestructuración de sus créditos.
  • El acceso en ese sentido a la liquidez que les permita apalancar dichas operaciones.
  • Y tres, por supuesto, subsidios a la nómina.

Esto, además de una apuesta que en el plano nacional debe permitirnos recuperar el mercado doméstico y, en ese orden de ideas, más allá de las medidas de corto plazo que se deben tomar, encaminadas a solucionar los problemas de liquidez por parte de los empresarios.

Lunes festivos como días laborales

Aquí se está descuidando el hecho de que buena una buena parte de los colombianos y las colombianas han tenido que trabajar desde sus casas, lo que implica mayores cargas en materia laboral, con jornadas de trabajo más extensas, con una preparación bastante exegética en relación al manejo de las tecnologías de la información, sino que adicionalmente ha implicado gastos, por ejemplo, en materia de servicios públicos como electricidad y datos móviles.

Medidas como estas realmente no ayudan de fondo a solucionar el asunto. Es más, incluso podríamos quitar los domingos como días festivos en lo que queda del año y eso no va a solucionar la situación. Aquí lo que se requiere son cambios en términos de la manera como la economía colombiana, por ejemplo, se hace más vulnerable a choques externos como el que se está presentando ahora

Medidas para las familias colombianas